Nutrición durante la radioterapia en cáncer de cabeza y cuello
La radioterapia es el tratamiento más utilizado durante el cáncer, especialmente en tumores de cabeza y cuello. Aunque puede afectar a la capacidad de alimentarse de los pacientes.
¿Qué podemos hacer para que nuestra alimentación no sea un problema durante la radioterapia?
Radioterapia: es un tratamiento basado en la radiación de alta potencia para reducir o eliminar las células cancerosas. Aunque es efectiva, en el caso de ser utilizada en cabeza y cuello produce algunas posibles complicaciones, especialmente por la proximidad de órganos y tejidos vitales, como la boca y la garganta, generando frecuentemente efectos secundarios que afectan a la nutrición y a la calidad de vida.
Los efectos secundarios asociados con la radioterapia de cabeza y cuello son:
La alteración del gusto, alterando las papilas gustativas, perdiendo o cambiando la percepción del sabor de los alimentos. Esto produce normalmente rechazo en los alimentos y hacia el propio hecho de alimentarse.
El dolor al tragar alimentos, con la inflamación y el daño de los tejidos de la boca y la garganta suelen producirse dolores al tragar, dificultando el consumo de alimentos sólidos.
La infección de la boca, la mucosa oral se daña por la radiación y es más susceptible a sufrir infecciones. Lo principal es mantener una higiene bucal rigurosa para prevenir complicaciones.
La dificultad para ingerir los alimentos, la inflamación y el estrechamiento de la garganta producen que tragar sea incómodo o difícil, lo que limita la elección de alimentos.
La pérdida de apetito, produce que sea frecuente la desnutrición y malnutrición.
Las neumonías, son frecuentes al acumularse secreciones en las vías respiratorias.
La alteración en la apertura de la boca, se endurece y se reduce la movilidad en la mandíbula, esto dificulta que se pueda abrir la boca con normalidad y finalmente que se consuman los alimentos necesarios.
La nutrición durante la radioterapia en cabeza y cuello se basa en mantener una nutrición adecuada para combatir los problemas nombrados y mantenerse con energía, reduciendo el riesgo de infecciones y mejorando la calidad de vida.
La importancia de la alimentación durante el tratamiento es significativa, poder comer y nutrirse adecuadamente es fundamental para mantenerse fuerte durante la mayor lucha que va a tener nuestro cuerpo. La alimentación planificada puede reducir los efectos secundarios y mantener un nivel óptimo de fuerza y resistencia.
Los cuidados específicos para una alimentación saludable son muchos pero principalmente se deben utilizar proteínas de alta calidad, ya que las proteínas actúan en la reparación de tejidos y en la función inmunológica. Durante la radioterapia, se recomienda el consumo de proteínas de alta calidad, como carnes magras, pescado y huevo. Estos alimentos ofrecen aminoácidos esenciales para la recuperación y el mantenimiento de la masa muscular.
Controlar la fibra, ya que es una parte importante de la dieta equilibrada, pero es importante saber que durante la radioterapia en el cáncer de cabeza y cuello, puede producir diarreas. Por esta razón, se recomienda utilizar alimentos bajos en fibra o fibra modificada para evitar estas complicaciones gastrointestinales.
Evitar Alimentos Irritantes como los alimentos ácidos o picantes, ya que empeoran los síntomas durante la radioterapia. Evitar estos alimentos puede ayudar a reducir el malestar en la boca y la garganta.
Temperatura de los Alimentos consumir alimentos tibios o moderadamente calientes puede ser más cómodo para las mucosas irritadas, así que evitar los alimentos extremadamente calientes o fríos que posiblemente causarán molestias indeseadas.
La tabla de intercambios es nuestra herramienta
La tabla de intercambios de alimentos es una lista con alimentos que los pacientes pueden sustituir alimentos de manera equilibrada. Esto garantiza que se reciban los nutrientes necesarios durante la radioterapia sin comprometer la nutrición. Esta tabla debe ser elaborada y adaptada a cada persona, escogiendo los alimentos más adecuados según las características de la persona y escogiendo las cantidades adecuadas, no dudes en preguntar a tu nutricionista para conseguir una pauta adaptada.
Conclusión
La nutrición es siempre un factor importante durante toda nuestra vida, pero es especialmente importante durante el tratamiento de radioterapia en cabeza y cuello. Recuerda que durante el tratamiento médico es muy probable que aparezcan efectos secundarios y síntomas indeseados que pueden ser reducidos o eliminados por completo. Los fármacos pueden ser una opción pero siempre tendrán mayores inconvenientes que seguir una dieta personalidad. Recuerda en escoger los alimentos bajos en fibras, que no irriten la mucosa o que no tengan temperaturas inadecuadas. Cada consejo cuenta y cada comida es una batalla ganada en la lucha.
Las recomendaciones y datos incluidos en este blog no pretenden sustituir los consejos de su médico y/o nutricionista clínico. El autor (Joan Zamora) no se responsabiliza de las posibles consecuencias de la mala aplicación de esta información. La recomendación del autor es que usted acuda a un profesional sanitario cualificado. Los únicos profesionales cualificados para proporcionar programas dietéticos nutricionales son los propios graduados / diplomados universitarios en nutrición humana y dietética y el médico especialista endocrino. Cualquier otro profesional sanitario o persona que le diga lo contrario realiza intrusismo y carece de los conocimientos necesarios. Le recomiendo que no ponga en peligro su salud ni su confianza, apoye la nutrición personalizada y de calidad.